Hablar sobre Al Jazeera es hablar sobre el espectacular auge de un medio de comunicación gracias a su forma de actuar, comunicar e informar. Este canal ha logrado situarse hoy día como uno de los medios de comunicación global más importantes y una fuente fiable de información para la población árabe de todo el mundo.
Al Jazeera nació en 1996 con la vocación de ser un canal de noticias 24 horas vía satélite y dirigido al mundo árabe. Fue levantada por el poder financiero de los petrodólares del Emir de Catar. El objetivo del Emir al proyectar este canal de noticias era adquirir influencia mundial para Catar como parte de una nueva estrategia de política exterior. El canal mantiene las directrices marcadas por el Emir, las cuales se basan en ser un referente de noticias políticamente independiente para oriente medio y todo el mundo árabe. Además, la cadena pretende proyectar una visión moderna de la cultura del islam, dando voz a todas las opiniones, fraguando de esta forma una independencia informativa nunca antes imaginada.
La línea editorial marcada por Al Jazeera le ha valido numerosas quejas, dependiendo de la perspectiva con la que se mire: para los gobiernos de los países árabes la cadena resulta ser un peligroso espacio de información y sin censuras, mientras que para muchos de los países occidentales resulta un altavoz de terroristas, como Bin Laden o Al Qaeda. Sin duda, un arma de doble filo que este medio de comunicación ha logrado dominar.
Los inicios de Al Jazeera fueron aplaudidos por la Casa Blanca de Estados Unidos, celebrando la muestra de libertad de prensa en el mundo árabe. Aún en estos inicios la cadena pasaba casi desapercibida para el resto del mundo. Pero el gran punto de inflexión llegó en 2001 tras los atentados del 11-S. Al Jazeera se dio a conocer a todo el mundo, captando la atención de millones de personas, al difundir los mensajes grabados de Bin Laden y Al Quaeda. En este momento la cadena comenzaría su tortuoso crecimiento hasta lograr ser un gigante de la comunicación. Tortuoso por que la delegación Bush acusó a la emisora de tener lazos de amistad con Al Qaeda, y poco después el ejercito americano bombardeó (accidentalmente o no) las delegaciones que la empresa tenía en las ciudades de Bagdad y Kabul. Las tensiones entre el gobierno de Estados Unidos y Al Jazeera lograron relajarse a partir de 2008 con la llegada de la administración Obama. Por otro lado, en otra banda de tortuosos infortunios, Al Jazeera ha sido vetada, a lo largo de su trayectoria, en distintos países con gobiernos autoritarios y críticos con la política de libertad de información, entre ellos: Siria, Jordania, Kuwait o Arabia Saudí.
Los altos índices de audiencia reflejaban el éxito de la cadena catarí, lo que hizo que la cadena tomase la decisión de ampliar su horizonte, a partir de 2003, abriendo una importante red de nuevos canales. Comenzaron con la incorporación de varios canales deportivos. En 2005 abren dos: uno infantil y otro que sólo emite en directo conferencias y ruedas de prensa de interés para el mundo árabe. En 2006 arranca Al Jazeera Internacional, un canal 24 horas similar al original pero con todo el contenido en inglés. En 2007 nace Al Jazeera Documentales. En 2011, Al Jazeera se hace con los derechos de emisión de las principales ligas de futbol mundiales y se lanza a la aventura fundando su propia la plataforma de canales deportivos por satélite y cable, con el modelo de pago por visión, Al Jazeera Sports (actualmente llamada beIN Sports).
Los tentáculos de los petrodólares cataríes saben de negocios y en agosto de 2013 se adentran a la conquista de Estados Unidos lanzando Al Jazeera América. Sin duda una gran apuesta empresarial de la televisión del emirato con la que pretende robar audiencia a las grandes cadenas CNN, NBC y FOX NEWS. La estrategia de Al Jazeera para aumentar sus espectadores en Estados Unidos se basa, por un lado, en reducir los minutos destinados a publicidad con respecto a sus competidores americanos y por otro lado, apoyándose sobre la imagen de calidad que han conseguido forjarse con el despliegue de medios informativos durante las revueltas de la primavera árabe. La apertura de este canal en Estados Unidos ha sido catalogado por The New York Times como “la aventura televisiva más ambiciosa desde que Rupert Murdoch y Roger Alies estrenaron Fox News”.
En los últimos meses del reciente año 2014, Al Jazeera está tanteando la posibilidad de ampliar nuevas metas, en su afán de desarrollo empresarial, en diversos intentos de comprar la mayoría del accionariado de la empresa española PrisaTV (antigua Sogecable) para hacerse con el control de la plataforma Digital+. Sin lugar a dudas, un gran juego empresarial que muestra la capacidad económica catarí para hacerse con el control de los derechos de emisión de todas las ligas de futbol europeas, añadiéndolos a los derechos que Al Jazeera tiene ya tiene adquiridos por varios años y que actualmente explota en más de 20 canales de pago a través de beIN Sports.
Finalmente, la realidad actual es que Al Jazeera ha diversificado su oferta en apenas veinte años, logrando estar hoy presente en más 260 millones de hogares en 130 países. Actualmente se desconoce la cifra de la financiación aportada por el Emir de Catar a la cadena, pero lo cierto es que Al Jazeera ha logrado generar un músculo de negocio tan fuerte que, sólo en ingresos por publicidad y los contenidos de pago por visión de los canales deportivos, lograría dejar boquiabierto al mismísimo Rupert Murdoch.